Cabellos del mundo. Parte 4: cuidado del cabello al estilo sudamericano

Cabellos del mundo. Parte 4: cuidado del cabello al estilo sudamericano

América del Sur es una región donde la cosmetología y la medicina estética modernas entran en contacto con la tradición secular y las plantas milenarias de gran poder. Los antiguos incas descubrieron las propiedades embellecedoras y saludables de hierbas, extractos de frutas, semillas, rizomas. Las mujeres de Brasil, además, mejoran su belleza con todos los logros de la medicina estética y la cosmetología avanzada. Esta es una zona con un gran sentido de la belleza, desde aceites ancestrales de gran poder hasta tratamientos de alisado con queratina. Por suerte, tenemos la oportunidad de aprender mucho sobre el cuidado capilar gracias al temperamento, los conocimientos y la experiencia de los habitantes de este rincón del mundo colorido, caluroso y rodeado de naturaleza salvaje.

EL CABELLO EN DIFERENTES RINCONES DEL MUNDO - PARTE 4 - AMÉRICA DEL SUR

¿Qué podemos aprender de las mujeres de Brasil, Chile o Argentina?

América del Sur: Argentina - Cuidado del cabello

Las mujeres de Argentina son conocidas por cuidar su pelo muy bien o, para ser más exactos, por mejorar su aspecto por todos los medios que la medicina estética y una avanzada cosmetología ponen a su alcance. Debido al caluroso clima y a las altas temperaturas, las argentinas se ven obligadas a cuidar más intensamente su cabello, cuero cabelludo y piel. Una de las sustancias más populares y valoradas en este país, y la cual tiene grandes cualidades para la salud y la belleza, es el camaldolese, también llamado tepezcohuite o mimosa tenuiflora. Se trata de un extracto de corteza de mimosa, un potente antioxidante que en Argentina se considera un elixir de juventud.

Este extracto es muy conocido por retrasar los procesos de envejecimiento de la piel y se utiliza de buen grado en diversos productos dedicados al cuidado de la piel madura y el cabello. En mascarillas y acondicionadores capilares, tiene una función hidratante adicional, muy importante teniendo en cuenta un clima tan caluroso y poco propicio para el cabello como el argentino. El extracto de corteza de mimosa refuerza los vasos sanguíneos y estimula los bulbos para que trabajen de forma más intensa. El tepezcohuite se puede utilizar incluso en el cuero cabelludo sensible, ya que es capaz de aliviar todas las irritaciones e inflamaciones y de proporcionar protección contra el sol abrasador. Además, este extracto tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, protege contra las infecciones, reduce la hinchazón y el enrojecimiento de la piel, estimula los bulbos y fortalece los folículos pilosos. En consecuencia, el extracto de corteza de mimosa previene la caída del cabello y mejora notablemente su estado.

Toda América del Sur está enamorada del tepezcohuite y su corteza es tan apreciada que ha encontrado un lugar destacado en la línea de cosméticos capilares lanzada por Salma Hayek.

Otro alabado y muy conocido cosmético natural es la manteca de cacao. Crece en toda América del Sur, pero las mejores variedades se encuentran en las regiones meridionales del subcontinente. La manteca de cacao es de color marrón, se parece a la pulpa del chocolate y tiene un olor increíble. Las mujeres argentinas la utilizan para el cuidado facial, corporal y capilar, especialmente para el cabello seco, encrespado, rebelde y sin brillo. La manteca de cacao cuida el cuero cabelludo a la perfección: calma las irritaciones, protege del fuerte sol tropical y mejora la elasticidad del cabello. Esta manteca puede aplicarse en las puntas para protegerlas de los daños.

América del Sur: Brasil - Cuidado del cabello

Brasil se asocia principalmente con las zonas salvajes y no contaminadas de la Amazonia. De allí proceden todas las sustancias más valiosas, famosas internacionalmente y con grandes cualidades embellecedoras y acondicionadoras. En la Amazonia abundan los aceites y mantecas tropicales naturales que las mujeres de Brasil utilizan de buen grado para tratamientos capilares con aceite y para el cuidado facial y corporal. Además, estos productos se combinan con infusiones de hierbas destinadas al tratamiento de enfermedades leves y dolencias cutáneas.

¿Qué utilizan las brasileñas en sus rutinas de cuidado capilar?

  • Manteca de cupuacu: se extrae de las semillas de una variedad concreta de la planta del cacao (el árbol cupuacu), pariente de la manteca de cacao. ¿Cómo influye en el cabello? En primer lugar, se absorbe fácilmente y no sobrecarga los mechones. La manteca de cupuacu es suave con el cuero cabelludo y renueva la capa hidrolipídica de la piel, garantizando los adecuados niveles de hidratación en el pelo y el cuero cabelludo. Se regenera perfectamente porque contiene una alta concentración de fitoesteroles (y estos, a su vez, tienen la capacidad de estimular la síntesis de colágeno). Además, los fitoesteroles reducen la degradación de la elastina y refuerzan las raíces del cabello porque son ceramidas de nuestra piel. La manteca de cupuacu aporta una gran cantidad de vitaminas: C, E y A, potentes antioxidantes. La presencia de ácidos grasos insaturados y saturados en la manteca de cupuacu asegura una regeneración intensiva del cabello y permite que esta manteca sea apta tanto para cabello de baja como de media porosidad.
  • Aceite de babasú: se extrae de las nueces recogidas de la palmera Cohune brasileña. Este aceite contiene hasta un 90 % de ácidos grasos saturados, que nutren perfectamente el cabello grueso y pesado de los brasileños. El aceite de babasú contiene una gran cantidad de esteroles vegetales y vitamina E, siendo su principal cometido mejorar la ligereza del cabello, nutrir el cuero cabelludo y limpiar a fondo para eliminar toxinas y sebo. Además, este aceite mejora el estado del cabello, le aporta suavidad y aumenta su volumen, a la misma vez que suaviza su estructura. Gracias al aceite de babasú, el cabello obtiene protección contra condiciones climáticas adversas. Además, este aceite ayuda en la lucha contra la caspa y también tiene resultados antisépticos.
  • Aceite de pequi: este es otro aceite exótico y algo menos conocido, extraído de las semillas del Caryocar brasiliense. Este aceite es especialmente apreciado en el cuidado del cabello que ha sido sobreprocesado, debilitado por peinados con calor, tintes o decoloraciones. El aceite de pequi ayuda a mantener la hidratación y fortalece la estructura capilar, gracias a lo cual, el pelo mantiene su buen estado: se mantiene fuerte y con brillo, sin secarse ni encresparse. El aceite de pequi también se ocupa de las puntas dañadas y deshidratadas del cabello.
  • Aceite de roucou: es un aceite caro, pero valioso que se ocupa de los primeros signos de envejecimiento del cabello, evita el encanecimiento y previene la caída del (siempre que se utilice con regularidad). Además, este aceite posee propiedades antibacterianas y calmantes. El aceite de rocou procede de las semillas del achiote (Bixa orellana), un arbusto o pequeño árbol que crece en la selva amazónica. Cuando se utiliza en el tratamiento capilar con aceite, consigue que los mechones ganen brillo y suavidad. Este aceite transporta toda una serie de ingredientes regeneradores, como magnesio, calcio, selenio o ácido salicílico. El aceite de roucou también es rico en las llamadas vitaminas de la juventud: vitamina A y E.
  • Aceite de nuez de Brasil: este es otro aceite apreciado por sus potentes propiedades antiedad. Su composición presenta una diversidad de ácidos grasos (más del 75 % de ácidos palmitoleico, oleico y linolénico). Esta elevada concentración hace que el aceite de nuez de Brasil sea responsable del buen funcionamiento de las células de la piel y de la matriz capilar. Además, este aceite ayuda a combatir diversos problemas cutáneos, así como a nutrir el cuero cabelludo y prevenir irritaciones, favoreciendo la reconstrucción y regeneración de las ceramidas. El aceite de nuez de Brasil también regula el nivel de hidratación capilar y protege al cabello de los efectos nocivos de factores externos. El aceite de nuez de Brasil contiene vitaminas E y A y fitoesteroles, muy valiosos para el cabello (entre ellos, el sistosterol). Este aceite es una gran fuente de magnesio, el cual interviene en la producción de proteínas (queratina), el material estructural natural clave que compone el cabello.

Los preciados aceites y mantecas exóticos no son lo único de lo que pueden presumir los brasileños. También vale la pena recordar que a ellos le debemos el mundialmente famoso tratamiento de alisado con queratina.

El tratamiento de alisado con queratina: también conocido como tratamiento brasileño de queratina o alisado brasileño, es un procedimiento que se realiza para mejorar el aspecto del cabello. La mayoría de la gente que decide someterse a este tratamiento lo hace para alisarse el pelo. Sin embargo, su principal beneficio es una nutrición en profundidad basada en la reposición del déficit de queratina en las estructuras internas del cabello. Esta terapia intensamente regeneradora reconstruye cada pelo haciéndolo más grueso, hidratado y protegido contra los daños y la deshidratación. Como resultado, el cabello se vuelve radiante y saludable, adquiriendo un magnífico aspecto. El tratamiento capilar con queratina sella las escamas del pelo gracias a lo cual la superficie capilar se alisa. Gracias a este tratamiento, presumirás de un cabello grueso, resistente y lleno de vitalidad, al igual que las mujeres de América del Sur. Vale la pena mencionar que el mejor tipo de queratina proviene de Brasil, ya que es la zona donde tiene sus raíces y tradición. Es este sentido, puedes estar segura de que la queratina se procesa adecuadamente y se complementa con ingredientes de gran calidad.

América del Sur: Chile - Cuidado del cabello

Las mujeres de Chile también pueden presumir de un aceite natural de gran calidad: la baya de maqui (Aristotelia chilensis). Este aceite se prensa en frío a partir de las semillas del fruto recogido del arbusto del mismo nombre. Los arbustos de maqui crecen salvajes y sus frutos son recogidos a mano por los indios mapuches, que cultivan las plantas y extraen valiosos aceites desde hace siglos, transmitiendo la tradición de generación en generación. Los indios mapuches dominan el arte de utilizar no solo los huesos y frutos de la baya maqui, sino también sus hojas, raíces y tallos.

El aceite extraído del fruto de la baya es una valiosa fuente de antioxidantes. Por ello, se trata con la debida reverencia y pietismo y se considera un elixir de juventud. Este aceite contiene principalmente omega-6 y omega-9, así como una concentración extremadamente alta de vitamina E y esteroles vegetales, que regeneran y embellecen perfectamente el cabello. El aceite de bayas de maqui mejora la elasticidad del pelo, mantiene firmemente los bulbos en el folículo piloso (en consecuencia, evita la caída del cabello), estimula el crecimiento capilar y regenera la piel. El aceite de baya de maqui también fortalece la barrera hidrolipídica de la epidermis, complementa la falta de grasas en la piel y el pelo, y mejora la penetración de nutrientes en la piel y en la matriz del cabello.

América del Sur: Ecuador - Cuidado del cabello 

Probablemente la fruta tropical más exótica (la manzana azucarera) procede de Ecuador. Esta fruta se parece a una gran frambuesa de color verde púrpura que deja ver una pulpa dulce y aromática bajo su gruesa piel. La manzana azucarera es rica en una serie de minerales: (fósforo, calcio hierro) y aporta un conjunto de vitaminas: A, E, C, PP. Como ingrediente beneficioso de diversos cosméticos para el cuidado capilar, la manzana azucarera presenta cualidades muy nutritivas, regeneradoras y calmantes. Así, acelera la curación de las zonas irritadas del cuero cabelludo. La manzana azucarera no solo aporta vitaminas y minerales, sino que también barre perfectamente las toxinas gracias a su contenido en ácidos de limón y manzana, destinados a exfoliar, desinfectar y, al mismo tiempo, acidificar adecuadamente el cuero cabelludo normalizando el sebo (los ácidos también aportan propiedades potenciadoras del brillo). Las ecuatorianas presumen de la manzana azucarera, utilizándola ampliamente como mascarilla para el cuero cabelludo, el pelo y la piel del rostro.

América del Sur: Colombia - Cuidado del cabello

  • Minthostachys mollis (muña o menta de los Andes): esta es una planta medicinal que se da principalmente en Colombia y Venezuela, pero también puede encontrarse en el norte de Brasil, Ecuador y Perú. El principal ingrediente de esta planta es el aceite de menta, que contiene mentol, isomentona y numerosos terpenos (entre ellos geraniol, pulegona, linalol y alcohol isoamílico). El extracto obtenido de la parte sobre tierra de la muña se utiliza en la elaboración de diversos productos de belleza. La muña tiene propiedades antisépticas: desinfecta, combate y cura las infecciones cutáneas causadas por hongos y bacterias, mientras disuade a los insectos y protege contra las toxinas. La muña ayuda a deshacerse de los parásitos, combate la sarna y la caspa, apoya la lucha contra la dermatitis atópica y mejora el riego sanguíneo. Cuando se frota en el cuero cabelludo, la muña estimula los bulbos y, en consecuencia, acelera el crecimiento del cabello. Gracias a la muña, la piel recibe mejor los nutrientes. Los colombianos toman infusión de hierbas y utilizan la muña en la piel y el cabello para nutrir, regenerar y purificar el cuero cabelludo. En Colombia, existe la creencia de que la muña es capaz de combatir el virus del VIH y se utiliza mucho incluso en casos de SIDA en fase avanzada.

América del Sur: Perú- Cuidado del cabello

En términos de cuidado corporal, capilar y facial, los peruanos tienen algo de lo que presumir. Y es que los peruanos le deben muchos productos naturales de gran eficacia a los Incas: sus antiguas recetas y sustancias derivadas de plantas siguen siendo muy populares hoy en día y no solo entre la población local. El té inca, el aceite de inchi inca o el amaranto son productos mundialmente conocidos. ¿Cuál es su cometido en el cuidado capilar? ¿Qué más utilizan los habitantes de Perú para mejorar el aspecto de su cabello?

  • El jabón peruano: es el orgullo de los peruanos. Se trata de un aceite natural (contiene más del 92 % de ingredientes de origen vegetal), delicado y excelente para el lavado porque tiene una reacción compatible con la piel humana. El jabón peruano tiene un bonito color esmeralda y es perfecto para lavar rostro, cuerpo y cabello. Este producto elimina perfectamente la grasa después de un tratamiento de aceite capilar, regenera el cabello seco, garantiza un nivel óptimo de hidratación, nutre y limpia el cuero cabelludo, devuelve luminosidad al pelo y hace que el cabello esté más suave y agradable al tacto.
    El jabón peruano es semilíquido y recuerda a una pasta celeste con un agradable aroma. Este jabón elimina perfectamente el maquillaje, tensa la piel y se retira con facilidad sin dejar residuos grasos. Además, el jabón peruano es muy eficaz: se trata de un cosmético natural multifuncional con una consistencia agradable y una fórmula rica en nutrientes naturales.
  • La maca, también llamada ginseng peruano: tiene propiedades muy beneficiosas para la salud. La maca se utiliza principalmente como medicamento e ingrediente enriquecedor de dietas equilibradas, ya que fortalece los huesos, aporta energía, proporciona un gran número de vitaminas, y mejora la potencia y la fertilidad. También es un componente en cosméticos, incluidos los destinados a lavar y nutrir el cabello. Su presencia en mascarillas capilares está plenamente justificada: la maca es un auténtico refuerzo vitamínico tanto para el cabello como para la piel. La maca también refuerza el pelo y lo protege de los daños. Cabe mencionar que los incas ya veneraban la maca y la utilizaban durante sus ritos religiosos. Tales rituales dejaban entrever la singularidad de la maca y sus potentes efectos curativos.
  • Quinoa: su uso en productos para el cuidado de la piel y el cabello sigue pareciendo bastante exótico en algunas regiones del mundo. Sin embargo, en Perú la quinoa no sorprende a nadie como cosmético, soliendo acompañar a otros aceites naturales, por ejemplo, la manteca de karité. Como cosmético, la quinoa nutre perfectamente la piel y el cabello, aportándoles gran cantidad de ácidos grasos omega-3, proteínas, antioxidantes y vitaminas (entre ellas la B2, también conocida como riboflavina y la cual proporciona vitalidad y elasticidad a la piel y el cabello). Además, la quinoa favorece la producción de colágeno y protege contra la pérdida de humedad. La quinoa es fuente de numerosos aminoácidos y mejora la reparación de los tejidos dañados. Los peruanos la utilizan con gusto para regenerar y proteger el cabello de los daños. La quinoa cuida el nivel adecuado de hidratación del cabello y lo protege de la sequedad, desde la raíz hasta las puntas.
  • Physalis peruviana: los incas la llamaban "mora de oro". Seguramente, todas las mujeres de Perú le darían a la physalis peruviana o uchuva una medalla de oro por su contenido en nutrientes (vitaminas A, C, las más importantes del grupo B: B1, B2, B3, así como fósforo, hierro y calcio). En el cuidado capilar, la uchuva es un valioso componente de mascarillas y acondicionadores, ya que regenera perfectamente, mejora el metabolismo celular, pule, protege y previene la caída del cabello. Esta planta es también un excelente manjar ligeramente dulce.
  • Aceite de semilla de inca inchi: procede de un pequeño arbusto verde que da sabrosas nueces, escondidas en un fruto de extraña forma. Hasta hoy, el método más eficaz para obtener este aceite (también conocido como sacha inchi) es exprimir las semillas a mano en prensas especiales. De este modo, el aceite no pierde sus valiosas propiedades: se prensa en frío y sin refinar. El aceite de sacha inchi es inusual: sus proporciones de ácidos grasos consiguen que se le conozca como el "aceite omega inca". ¿Por qué? Porque contiene aproximadamente un 48 % de ácido graso omega 3, un 36 % de ácido graso omega 6 y un 8 % de ácido graso omega 9. Este equilibrio ideal de ácidos grasos se traduce en excelentes propiedades para la salud y la coméstica. El aceite de semillas de inca inchi tiene muchas propiedades regeneradoras, penetra rápida y eficazmente en la piel y el cabello, fortalece las raíces y previene la caída capilar. Además, este aceite mejora la estructura del cabello, estimula el trabajo de las células y potencia su renovación. Pero esto no es todo. Este aceite es capaz de reafirmar la piel del cuerpo, reducir las cicatrices y las arrugas finas, y retrasar los procesos de envejecimiento del cabello (incluido el encanecimiento). El aceite de inca inchi es también un poderoso antioxidante con un alto contenido de vitamina A, una vitamina responsable del crecimiento del cabello, que asegura su buen estado y protege contra el secado excesivo y la debilitamiento. Inca inchi es un aceite extremadamente delicado que cura rasguños e irritaciones de la piel, protegiendo incluso la piel atópica.
  • Aceite de amaranto: también conocido como amaranthus cruentus. El aceite de amaranto es una valiosa fuente de ácidos grasos buenos (principalmente linoleico), así como de escualeno y tocotrienoles. El amaranto, utilizado en el cuidado del cabello, regenera, protege y embellece mechón a mechón. El ácido linoleico es responsable del buen funcionamiento de la piel y de los bulbos pilosos. Además, se trata de un potente hidratante y un componente de las ceramidas. Gracias a ello, el amaranto es una fuente de ceramidas de tipo 1, valiosas para el cabello y la piel. Su gran contenido en escualeno equilibra el nivel de sebo y evita la seborrea. Cuando se trata de piel y cabello deshidratados, su cometido es aportar alivio y la dosis adecuada de hidratación. El aceite de amaranto es perfecto para aceitarse el pelo, ya que protege perfectamente los mechones de los efectos nocivos de las condiciones climáticas. Este aceite no solo alivia las inflamaciones, sino que también suaviza la estructura capilar, controla los mechones rebeldes y aporta brillo al cabello. El aceite de amaranto suele añadirse a mascarillas y bálsamos capilares para hidratarlos y conseguir que los mechones ganen elasticidad y buen aspecto.
  • Uncaria tomentosa: también conocida como uña de gato y a menudo denominada vilcacora (uncaria tomentosa). Se trata de una planta trepadora conocida en todo el mundo, pero su mayor reconocimiento y mejores variedades se dan en Perú. La uña de gato es ideal para el cuidado del cabello debilitado y delicado con tendencia a caerse. Los peruanos usan de buena gana champú con su contenido. La vilcacora hace que el cabello tenga un aspecto envidiable, quedando liso y suave, además de potenciar su brillo y encanto. Además, la uña de gato alivia la irritación del cuero cabelludo. En otras partes del mundo, se comercializa principalmente en forma de comprimidos, como suplemento contra diversas enfermedades y dolencias. En Europa, su nombre más común es uña de gato.

Repleto de temperamento, exotismo, abundantes zonas salvajes, prístinas y no contaminadas, el continente americano tiene una riqueza inagotable de sustancias cosméticas naturales con enormes poderes. Merece la pena recordarlas y aplicarlas en las rutinas de cuidado del cabello y la piel. Al fin y al cabo, las mujeres que viven en América del Sur son famosas por su cabello abundante, bonito, grueso y sano, que crece largo y fuerte, ablandando el corazón de todo muchacho.

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