¿Por qué las personas locas por el cuidado del cabello apuestan tanto por los tratamientos capilares caseros? Porque son económicos y muy eficaces. La terapia capilar completa se realiza en un lugar cómodo: la intimidad de tu propia casa. Te sientes libre, puedes escuchar música, leer... además, la rutina de cuidado capilar está directamente orientada a las necesidades de TU cabello: eres tú quien elige los productos y le da al cabello exactamente lo que necesita. Realzar la belleza es más cómodo en tu casa que en ningún otro lugar. Gracias a una secuencia de tratamientos intensivos, tu peinado tiene la oportunidad de recibir un toque de belleza instantáneo.
SPA capilar, ritual de belleza lento, tratamientos capilares naturales, SPA capilar hecho por uno mismo... hay muchos nombres y un único objetivo: nutrir al máximo y mejorar notablemente el aspecto y el estado del cabello. Como resultado, tu cabello luce como si hubiera sido tratado con una terapia de salón avanzada. La diferencia es que te sientes más libre y el tratamiento es barato y relajante. Puedes dedicar un día entero, por ejemplo el domingo, exclusivamente al cuidado del cabello: sin prisas, de forma relajada, totalmente concentrado en el pelo. A las adictas al cabello les encanta combinar los tratamientos capilares con otros rituales de belleza, por ejemplo, mascarillas y exfoliantes faciales, SPA de uñas variados, baños nutritivos para los pies, etc. ¿Y el cabello? En un solo día se transforma por completo.
Echa un vistazo a nuestro programa detallado que va a dar la vuelta a tu peinado en sólo una tarde, devolviéndole su aspecto fabuloso y acondicionándolo desde los folículos hasta las puntas. Descubre los 10 pasos que te llevarán a un cambio de look total.
Purificar el cuero cabelludo es la clave del éxito y el refuerzo de cualquier tratamiento capilar. La exfoliación del cuero cabelludo, aún infravalorada pero recomendada incluso por los tricólogos, permite eliminar todas las toxinas, la sobrecarga de productos, las impurezas, el exceso de sebo y las células muertas y, sobre todo, prepara de forma excelente el cabello y el cuero cabelludo para recibir los principios activos. El exceso de células muertas y la acumulación de productos (especialmente, imprimaciones de peinado o champús secos) cubren el cuero cabelludo y las raíces del cabello con una capa que impide que las sustancias activas penetren en los folículos y el cuero cabelludo.
Puedes comprar un exfoliante ya preparado o hacerlo tú misma. Aun así, un exfoliante enzimático para el cuero cabelludo es el que más beneficios aporta: es el más preciso y no requiere frotar, por lo que es el más sensible a las raíces del cabello; es el más crucial en cabellos finos y frágiles.
Aplica el exfoliante sobre el cabello y el cuero cabelludo húmedos, masajea durante un rato o, si se trata de un exfoliante enzimático, déjalo actuar el tiempo indicado en la etiqueta del producto y aclara con agua tibia. Ahora, no dudes en lavarte el pelo.
No sólo elimina los residuos del exfoliante, sino que también purifica el cuero cabelludo y el cabello. Este tipo de champú tiene una cualidad importante: levanta ligeramente las cutículas del cabello para aumentar su absorción y ayudarles a recibir los nutrientes. En otras palabras, un champú clarificante mejora la absorción del cabello, que absorbe fácilmente los principios activos.
Los aceites en el cuidado del cabello y el antiguo arte ayurvédico de su aplicación constituyen la base de un espléndido cuidado capilar. ¿Por qué? Porque están compuestos en su totalidad por excelentes ingredientes y acondicionan el cabello de diversas formas: no sólo mejoran la parte externa e interna del tallo, sino que también estimulan los folículos y restauran la buena forma del cuero cabelludo. Es el cuidado capilar más complejo que puede darse.
Los aceites contienen buenos ácidos grasos esenciales, fitoesteroles, flavonoides, carotenos, escualeno y un conjunto de vitaminas y micronutrientes que garantizan un cuidado perfecto del cabello. Se adaptan con precisión a la porosidad capilar, que es el tipo (y las necesidades) del cabello.
En un día dedicado exclusivamente al cabello, realiza un tratamiento capilar con aceite caliente completo: aplica un aceite ligeramente tibio sobre el cabello y el cuero cabelludo húmedos, masajea suavemente el cuero cabelludo y cubre el cabello con una compresa tibia para intensificar la acción del aceite.
El tratamiento con aceite capilar ocupa el centro del ritual; los demás tratamientos secundarios giran en torno a la rutina oleosa. Tanto la mascarilla como el acondicionador del cuero cabelludo o un exfoliante intensifican la eficacia de los aceites, complementándolos con nutrientes y haciendo que los ingredientes activos de un aceite actúen con mayor intensidad. Cuanto mejor sea la mezcla de aceites, más eficaz será todo el día de SPA para tu cabello. Para ofrecer lo mejor a tu peinado, elige uno de los tres aceites capilares Nanoil - es la mezcla más equilibrada de aceites naturales e ingredientes potenciadores (filtro UV, queratina, lanolina, seda, pantenol). Todo para proporcionar al cabello las sustancias más valiosas necesarias para su reparación y (re)crecimiento.
Enriquecida con vitaminas, proteínas y extractos de plantas (para aportar nutrientes adicionales y emulsionar el aceite). Nada va a eliminar la grasa tan fácilmente como una mascarilla aplicada después del tratamiento con aceite. Realiza dos funciones:
Si quieres que el SPA capilar de todo el día tenga sentido y dé resultados, atrévete a apostar por la variedad: un día usa una mascarilla de proteínas (para una reparación reforzada) y otro, humectantes (dan un impulso de hidratación al cabello seco).
Otro lavado del cabello para eliminar un aceite y una mascarilla. El segundo lavado permite evitar sobrecargar el cabello con mascarillas y acondicionadores ricos en nutrientes. Esta vez, el champú debe ser diferente: rico en vitaminas, hidratante, con proteínas como la avena o la seda, natural, que además cuide el cuero cabelludo y mantenga el equilibrio hidrolipídico del cuero cabelludo.
Una mezcla de aclarado complementa toda la jornada SPA para tu cabello. Es como la guinda del pastel: potencia el brillo, aporta suavidad, sella las cutículas capilares, mantiene equilibrado el pH del cuero cabelludo, suaviza las hebras y las hace agradables al tacto, al tiempo que desinflama el cabello y evita la electricidad estática.
El vinagre de manzana o frambuesa es la base más popular para los enjuagues capilares. Puedes comprar un enjuague de vinagre ya preparado o hacerlo tú mismo: consulta los mejores enjuagues caseros y pruébalos.
El último paso (pero no el menos importante) para mantener tu cuero cabelludo en forma. Una loción para el cuero cabelludo puede tener varias funciones: elige la adecuada para responder a las necesidades de tu cabello y cuero cabelludo. Si tienes el pelo graso, elige un acondicionador a base de plantas que normalice la función de las glándulas sebáceas. Por otro lado, si te molesta el pelo sin volumen y apelmazado, elige la loción que añade volumen y levanta las raíces del cabello. También hay acondicionadores para el cuero cabelludo que hidratan, calman la irritación o combaten la caspa. Todo depende del estado del cuero cabelludo y de las necesidades del cabello.
Una loción para el cuero cabelludo se utiliza exclusivamente para el cuero cabelludo y las raíces del cabello, por lo que debe ser suave, natural y no sobrecargar. No es necesario aclararla. Masajear el cuero cabelludo durante su aplicación estimula además los folículos y el cuero cabelludo.
Si tu pelo está dañado o la estación del año requiere una rutina de cuidado capilar intensificada (heladas o calor), utiliza un acondicionador en spray ligero, hidrosol vegetal u otro producto sin aclarado. Protegerá tu peinado de los elementos externos desfavorables.
Todas las obsesionadas con el cuidado del cabello hablan maravillas de las brumas o aguas florales que puedes pulverizar sobre el pelo húmedo antes del secado; también pueden ser ricas en aceites naturales que protegen excelentemente las hebras de las toxinas del aire.
El gel de linaza es un acondicionador natural sin aclarado muy utilizado. Es un tratamiento increíble que protege, suaviza e hidrata el cabello. Las semillas de lino tienen un magnífico efecto acondicionador, cuidan muy bien las puntas del cabello y dan un bonito toque final. Una receta exprés de gel de linaza consiste en verter agua tibia sobre algunas semillas de linaza (deben estar tapadas) y dejarlas reposar durante la noche. Al día siguiente, el gel está listo para usar (después de escurrir las semillas).
Las puntas son las partes del cabello que más rápido se resecan y dañan. Para evitar que se abran, aplícales todos los días un sérum protector o algún aceite natural. De esta forma, se mantendrán sanas y elásticas, y dejarán de estar encrespadas, deshidratadas o abiertas. El día de tu SPA capilar, no dudes en usarlo. Si no te gustan los productos capilares a base de silicona y prefieres los ingredientes naturales, puedes cubrir el cabello con una porción extra de gel de linaza mezclado con el aceite que elijas.
El gel de linaza no sólo protege las puntas del cabello de los daños, sino que también suaviza, hidrata y aumenta el brillo. Funciona como imprimación natural para el peinado y como acondicionador sin aclarado para potenciar el brillo. Para no apelmazar el cabello, añade un poco de agua: más agua hace que se parezca más a un acondicionador y menos a un sérum.
En un día de SPA capilar debes centrarte en la reparación del cabello, así que mejor olvídate de la rutina del secador o de todo tipo de peinados con calor.
Sin embargo, si realmente necesitas salir y necesitas un peinado impecable, utiliza un spray protector del calor antes de sacar el secador. Lo ideal es que el producto contenga ingredientes naturales, además de tener un efecto que aumente el brillo y peine suavemente tu cabello. El aceite de argán mezclado con agua es un spray protector del calor natural: mezcla unas gotas de aceite de argán con la infusión de hierbas elegida y pulveriza sobre el pelo antes de la rutina de secado.
Los efectos de una terapia capilar de un día son visibles después de cada primer tratamiento. Sin embargo, a lo largo de la semana, los nutrientes se eliminan, por lo que debes regalarle a tu cabello un día de SPA en casa con regularidad. Ganarás más si le das a tu cabello este tipo de estímulo nutricional al menos una vez a la semana. De esta forma, tanto el tallo como los folículos capilares se fortalecerán constantemente y te devolverán una vitalidad increíble y un aspecto espléndido.
Es difícil definir claramente el tiempo dedicado a los cuidados de belleza. Parece un extra - tú eres quien decide cuánto tiempo puedes y quieres mantener un aceite en tu cabello. Puede ser un estímulo rápido de 30 minutos o un tratamiento de varias horas. Muchas mujeres empiezan su día de SPA la noche anterior exfoliando el cuero cabelludo, lavando el pelo y aplicando un tratamiento de aceite justo antes de dormir. Después, por la mañana, siguen con otros pasos como la aplicación de una mascarilla capilar, enjuagues y acondicionadores para el cuero cabelludo. De este modo, el aceite tiene tiempo de reparar el cabello mientras se duerme. Sin duda, 3 horas es el mínimo que debes dedicar a todo el SPA capilar (recuerda que cuanto más tiempo le dediques a tu cabello, mejores resultados obtendrás).
El tratamiento con aceite capilar es sin duda la prioridad durante tu SPA capilar en casa. Todos los demás tratamientos están ahí para intensificar el efecto y complementar el elaborado y antiguo ritual capilar ayurvédico. Por eso, la elección de los aceites es tan importante: elige los aceites adecuados para tu porosidad, es decir, para el estado de tu cabello.
No pasa nada si te saltas una o dos etapas, terminando tu día de SPA después del segundo lavado. A menudo, a las mujeres les gusta utilizar los enjuagues capilares y las lociones para el cuero cabelludo por turnos, o simplemente renuncian a ellos (por ejemplo, cuando su cuero cabelludo no da muchos problemas).
Pues eso. Es hora de que prepares un SPA para tu cabello. Deja que experimente un cambio de imagen total y que brille, asombrando a los demás con vitalidad.
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