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Una piel joven no necesita tratamientos profundos ni una complicada rutina de cuidados. Hace frente a las adversidades con bastante facilidad y tiene buen aspecto incluso después de una noche en vela (es decir, de fiesta o estudiando). A pesar de ello, la piel joven requiere de unos cuidados diarios correctos para retrasar la aparición de arrugas en el futuro. Si tratas tu piel como es debido, se mantendrá joven y sin imperfecciones durante más tiempo. Te explicamos la mejor rutina de cuidado de la piel que debes seguir a los 20 años.
La piel a los 20 años está sana y en perfecto estado. No presenta arrugas, manchas de la edad ni ha perdido turgencia. Ya has pasado por la adolescencia, tan hostil para la piel. La tez es firme y el acné agudo ya no es una amenaza.
Generalmente, los granos aparecen sólo de vez en cuando, pero puede que estés luchando con las marcas post-acné. Afortunadamente, puedes deshacerte de ellas fácilmente con un suero facial de calidad que contenga vitamina C.
Además, el cutis a los 20 años está óptimamente hidratado, mientras que la zona de los ojos está libre de arrugas. En otras palabras, no necesitas ningún tratamiento avanzado o invasivo. Consulta un plan de cuidado de la piel que te garantice una piel perfecta a los 30, 40 y 50 años...
Si quieres mantener tu rostro impecable y con buen aspecto, asegúrate de no tener los poros obstruidos ni brotes de acné. La limpieza profunda es la base de la rutina de cuidado de la piel, así que nunca olvides desmaquillarte y nunca te vayas a dormir con el maquillaje puesto. Utiliza espumas limpiadoras suaves y agua micelar compuestas de ingredientes naturales. Evita los geles con abrasivos que irritan y resecan innecesariamente la piel.
Un pH de 5,5 (ácido) es el ideal y el más respetuoso con la piel. Por desgracia, los productos inadecuados para el cuidado de la piel alteran el equilibrio del pH, lo que hace que tu piel se vuelva muy seca o grasa. Se alteran todos los procesos que tienen lugar en el interior de la piel. Un pH demasiado bajo equivale a una secreción excesiva de grasa, falta de luminosidad e imperfecciones por todo el rostro. Un pH demasiado alto (alcalino) produce una piel muy seca e irritaciones.
¿Cómo mantener entonces el equilibrio del pH? Es muy sencillo: hazte con un buen tónico o agua floral que calme y nutra el cutis, pero que también restablezca el pH ideal. Para ello, la mejor solución es un producto que contenga ácido hialurónico y extractos de plantas.
La hidratación es esencial independientemente de la edad, pero sin duda es la clave a los 20 años. ¿Por qué? Si la piel joven se mantiene hidratada, tendrá más colágeno y elastina en el futuro. Tus productos de cuidado de la piel deben tener un alto contenido de ingredientes como ácido hialurónico, aloe vera, extracto de algas y aceites naturales ligeros (por ejemplo, aceite de argán, macadamia o jojoba), que evitan la pérdida de agua a través de la epidermis y mantienen los niveles óptimos de hidratación.
Si te gusta tomar el sol sin protección solar, puedes esperar que las primeras arrugas lleguen demasiado rápido. Esto se debe al fotoenvejecimiento, o daño de la piel debido a la radiación UV. Lo creas o no, si usaras FPS toda tu vida, ¡tu cutis se mantendría impecable incluso hasta los 60 años! Esto demuestra la importancia de la protección solar diaria. Una crema hidratante con un FPS mínimo de 20 es un elemento esencial de la rutina de cuidado de la piel, tan crucial como la limpieza.
¡Atención!
Los rayos UVA son más peligrosos para la piel que los UVB, porque llegan a las capas más profundas de la piel, destruyendo las fibras de colágeno y elastina que garantizan la elasticidad y firmeza de la piel. Por eso debes proteger el cutis y utilizar protector solar incluso en otoño e invierno.
La piel joven no requiere cuidados intensivos como la piel de 30 años o más, por lo que no son necesarias algunas sustancias activas avanzadas. La mayoría de los sueros están hechos para pieles envejecidas, sin embargo, puedes encontrar algunos que cuidan perfectamente la piel joven, fortaleciendo el cutis. El Suero Facial Hialurónico Nanoil es ideal para utilizarlo a los 20 años. El ácido de bajo peso molecular de su fórmula penetra en la dermis y mantiene una hidratación óptima. Pero recuerda siempre utilizar una crema hidratante después del sérum para nutrir y asegurar la piel frente a los rayos UV.
¿Te gustaría basar tu rutina de cuidado de la piel en las plantas? Utiliza otro potente sérum, uno rico en vitaminas, minerales y polifenoles beneficiosos. El sérum facial de aloe y té blanco es ligero y actúa muy bien por la mañana: úsalo para fortalecer la piel, calmar las irritaciones y proteger el cutis contra la contaminación urbana y las toxinas.
No, no la necesitas. Tu piel todavía está muy tersa y presume de una elasticidad ideal. Aunque la piel de debajo de los ojos es fina, debería conservarse en buen estado a los 20 años. La mayoría de las cremas para el contorno de ojos contienen algunos principios activos fuertes que pueden dañar innecesariamente la piel delicada, lo que también provoca la aparición de arrugas. Si realmente te apetece proteger esta zona del rostro, aplica una pequeña cantidad de un suero a base de ácido hialurónico sobre todo el rostro. Un suero ligero debe absorberse rápidamente, hidratando la piel y estimulando las proteínas que la mantienen tersa (colágeno y elastina). También debes acordarte de aplicar una pequeña cantidad de protector solar cuando la luz solar sea intensa.
Puede que te sorprenda, pero a veces es necesario. ¿Por qué? El retinol se añade a los productos antiacné. Si tienes 20 años y sufres brotes de acné, incorpora el retinol a tu rutina de cuidado de la piel.
Lo ideal es que consultes a un dermatólogo antes de empezar a utilizar un tratamiento con retinol. Esta forma de vitamina A también es ideal para deshacerse de las manchas de pigmentación y las manchas post-acné. Si te cuesta igualar el tono de la piel, el retinol resulta útil. El dermatólogo debe ayudarte a decidir si un tratamiento prescrito o un suero facial de retinol son lo más indicado para tu afección.
¡Es importante tenerlo en cuenta!
Puedes deshacerte fácilmente en casa de las pequeñas marcas posteriores al acné y de las manchas oscuras. Utiliza un suero facial de vitamina C todos los días: verás cómo tu cutis tendrá mejor aspecto y más saludable en poco tiempo. El rostro parecerá descansado y radiante. Esta vitamina esencial también evita que se acumulen células muertas en la piel.
Las glándulas sebáceas de la piel joven pueden estar trabajando en exceso, por lo que sin duda necesitas un impulso refrescante y aclarar el cutis de vez en cuando. Por eso una mascarilla natural a base de arcilla blanca es ideal para el cuidado de la piel a los 20 años. Puedes mezclarla con distintos ingredientes, como zumo de aloe, gel de linaza, aceites vegetales naturales o ácido hialurónico. Para una piel muy congestionada, prueba una mascarilla facial de carbón vegetal. Puedes hacerla tú misma mezclando polvo de carbón activado con un poco de agua o tu agua floral favorita. Asegúrate de que no esté demasiado líquida para que no se escurra por la cara.
Un exfoliante para pieles jóvenes debe ser suave y eficaz. La piel a los 20 años puede ser propensa al acné y a la obstrucción de los poros. El exceso de grasa, las toxinas, un estilo de vida ajetreado y dormir poco pueden afectar a tu cutis. Por eso es ideal utilizar un buen exfoliante enzimático una vez a la semana. Este tipo de producto se basa en ácidos frutales exfoliantes suaves, como el ácido glicólico, el ácido láctico o el ácido cítrico.
Prueba también un exfoliante facial casero y suave de almendras: mezcla una cucharada de almendras de grano fino, yogur natural o nata y miel. Aplica la mezcla sobre la piel de la cara y masajea durante unos minutos. Aclara bien.
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