El cuidado del pelo no se trata solo de proporcionar vitaminas e ingredientes reparadores dentro del pelo. Como el pelo está constantemente expuesto al daño, es crucial protegerlo, creando una capa especial oclusiva y embellecedora en la superficie, que no solo mantendrá las toxinas fuera de las escamas del pelo, sino que también retendrá la humedad esencial. De esta manera, las fibras del pelo mantienen el nivel de hidratación correcto. Los emolientes crean una barrera protectora para nuestros peinados.
Estas son unas sustancias increíblemente valiosas que deberían ser la base del cuidado profesional del pelo. Cada tipo de pelo necesita emolientes, sin importar la estructura, grosor, color o nivel de daño. Lo primero en lo que nos tenemos que enfocar es en la protección contra el sol abrasador, la radiación UV, el aire caliente de los secadores de pelo y las toxinas; sin ella, el cuidado del pelo no tiene sentido. Usar las cantidades correctas de emolientes es la clave. Demasiado puede hacer que pese el pelo y hacer que no se vea fresco. Demasiado poco lleva a la deshidratación, estática, falta de movimiento, rigidez y más frizz. Tenemos que recordar que los emolientes tienen unas propiedades hidratantes gentiles así que mejoran el aspecto del pelo y su brillo rápidamente.
El grupo de emolientes más grande y popular. Debes combinar aceites naturales y mantecas a la estructura y porosidad de tu pelo. Dan las mejores, más nutritivas y efectivas sustancias que regeneran el pelo. Además de la protección intensificada y de una capa delgada microscópica en la superficie del pelo, aportan muchos minerales, vitaminas, nutrientes y ácidos grasos valiosos en el interior del pelo. Por eso, tanto los aceites como las mantecas deberían estar incluidos en un buen cuidado del pelo. El tratamiento del pelo - una vez a la semana - protege y mejora el pelo, protegiendo la capa lipídica mientras que ofrece una nutrición profunda.
El grupo de polímeros que funciona en la superficie del pelo, que crea una capa protectora delicada. Ofrecen al pelo una capa suave que acondiciona y mejora incluso el pelo más dañado y tratado. Las siliconas son emolientes que se pueden encontrar en lociones de peinado, sprays y mousses, y productos de protección térmica que se deben de aplicar antes de una rutina de secado o planchado de pelo. En el cuidado del pelo, deberías escoger siliconas que se puedan quitar fácilmente. De esta manera, no se acumulará en la superficie del pelo y no lo apelmazará. Vale la pena mencionar que las siliconas están divididas en cuatro grupos: siliconas volátiles que se evaporan de la superficie del pelo; siliconas ligeras que se eliminan con agua; siliconas que se eliminan con champú; siliconas pesadas que son difíciles de eliminar con champús con sulfatos (irritantes, comedogénicos). Lo mejor es que evites las siliconas pesadas en tu cuidado del pelo.
Pertenece al grupo de emolientes que tienen una sólida consistencia. Es más pesada que las mantecas naturales. La cera no es tan fácil de aplicar y se aprecia por sus propiedades acondicionadoras, protectoras y suavizantes en el pelo. La cera puede tener origen natural o animal. La ceja de abeja es el emoliente más popular en esta categoría. Se añade a los bálsamos de pelo y acondicionadores, e incluso a las máscaras porque aumenta el brillo de manera increíble.
La igualmente popular lanolina es otro emoliente de origen animal. La lanolina protege la lana de oveja. Ha ganado popularidad y su estructura es similar a los lípidos que se encuentran en la superficie de la piel humana.
La jojoba es una cera bastante interesante, comúnmente conocida como un aceite. Es un fluido derivado de la cera. La jojoba contiene ácidos grasos, lo cual la hace similar a otros aceites. Este emoliente es extraordinario e incluye un único ingrediente: el escualeno, que tiene una estructura similar al sebo humano. Por eso la jojoba previene tanto el exceso de grasa como la deshidratación en el pelo y en el cuero cabelludo.
Ningún alcohol de cadena larga daña ni deshidrata el pelo. De hecho, lo acondicionan, hidratan y enlazan las moléculas de agua, manteniendo la humedad dentro. Gracias a los alcoholes grasos, el pelo se mantiene suave y elástico, se vuelve suave, delicado y fácil de peinar. Pertenecen al grupo de los tan llamados alcoholes buenos que pueden o incluso se deberían de incluir en el cuidado del pelo de todos los días. Los alcoholes grasos más populares: glicerol, cetílico, alcohol, alcohol cetearílico, alcohol laurílico, ácido esteárico y alcohol miristílico.
La parafina es un emoliente obtenido mediante la destilación del petróleo. Es natural.
Parafina: hidrocarburo saturado de cadena larga que crea un líquido incoloro e inodoro, un poco grasoso. Es neutro, por lo que no causa irritación o reacciones alérgicas. La parafina añade brillo de manera fantástica e hidrata el pelo; bloquea el agua y protege de la polución del medio ambiente. Es común en el cuidado del pelo. ¿Por qué? La parafina crea una barrera extremadamente fuerte y efectiva. Es un ingrediente increíble en los productos que protegen las puntas del daño. Como un emoliente, la parafina es muy popular entre las mujeres, suaviza el pelo y añade brillo después de cada uso. Mejora el estado del cabello al instante.
Parafina líquida - conocida por siglos como una sustancia para potenciar el pelo. Tristemente, puede irritar el cuero cabelludo así que déjala como máximo unos 20 minutos. Como calienta levemente el cuero cabelludo y acelera el riego sanguíneo, su uso regular puede acelerar el crecimiento del pelo. La parafina líquida deja una capa en la superficie del pelo: mantiene una hidratación apropiada y deja el pelo con más movimiento y menos estático.
El último grupo mencionado. Los polímeros no contienen ingredientes acondicionadores, son muy pesados y en su mayoría de origen químico. Estos emolientes son más comunes en productos de peinado y proporcionan una buena "fijación" además de aumentar el brillo. Si lo usas a menudo, pueden causar acumulación en la fibra capilar. Por suerte, se puede quitar el exceso de manera fácil al lavar el pelo.
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